La carrera por el Rectorado está a un par de semanas de arrancar. Una renovación política total: decanatos, consejos directivos, consejeros superiores de los cuatro estamentos y nuevas autoridades máximas. Los universitarios se pasarán la mitad del año esperando los resultados de las urnas.
Hasta ahora el único candidato seguro para suceder a la Rectora, Alicia Bardón, es su vicerrector, José García. No se avisora un contrincante en la otra esquina del cuadrilátero y se abona la posibilidad de que solo haya una fórmula.
“Creo que si se trabaja para hacer consensos y hay una aceptación se podría llegar a una fórmula única. Sería lo mejor porque de esa manera aparece una universidad que es capaz de hacer acuerdos”, reflexiona la rectora.
En 2014 la fórmula Bardón-García se impuso a sobre otras tres. La jornada de votación de la Asamblea Universitaria (es por voto indirecto) fue larga y todavía algunos la recuerdan como algo escandalosa. Votos “barquito”, con forma de origami y el que decía “maravilla” Bardón... la inventiva al servicio de los comicios.
“El trabajo político demanda mucho esfuerzo durante las elecciones”, insiste Bardón. Una sola opción permitiría que la “universidad siguiera funcionando”.
Todavía no es oficial quien acompañará en la fórmula a García, por lo que Bardón solo acota: “Siempre se ha buscado que uno de los dos tenga un perfil académico fuerte”.